Desde Fundación Integra entregan recomendaciones a los padres y familiares de los más pequeños del hogar.

Una de las tradiciones más esperadas por niños y niñas en cada Semana Santa, es la búsqueda de los huevitos que el conejo de Pascua deja en los hogares.
El Departamento de Salud y Nutrición de la Fundación Integra, entrega diversas recomendaciones para que el consumo de estos alimentos sea seguro y no conlleve riesgos en esta fecha especial para las familias.
Recomendaciones
Primero, es importante recordar que la ingesta de estos chocolates implica un cambio en la rutina de alimentación de los hijos/as. Por ello, se sugiere que su entrega y consumo sea moderado, considerando que poseen una alta cantidad de azúcar, grasa y calorías.
Los adultos/as deben revisar la información nutricional de estos productos, eligiendo los que posean una mayor cantidad de cacao y privilegiando además los que tengan menos sellos. También es clave la supervisión de padres y madres, para poder prevenir cualquier riesgo de obstrucción de la vía aérea.
El llamado es a preferir los huevitos “huecos” por sobre los macizos o rellenos, puesto que tienen un menor aporte calórico. Un niño o niña de entre cuatro a cinco años, debería comer como máximo seis huevos huecos por día, mientras que un niño o niña de dos o tres años, no más de tres unidades de este tipo, también por cada día.
Yocelin Sanhueza, jefa del Departamento de Salud y Nutrición de Fundación Integra, indicó que “sabemos el protagonismo que toma en esta festividad el chocolate. No obstante, hay que comerlos de forma moderada y asumiendo que tiene una gran cantidad de calorías, azúcar y grasas.
Tomemos esta instancia como una oportunidad para realizar dinámicas en familia que den sentido a esta fecha y que no estén centradas en comer. Por ejemplo, es posible ejecutar actividades al aire libre, donde niños y niñas se mantengan activos/as”.





