El suceso fue detonado por los familiares de un funcionario fallecido, quienes fueron reprimidos.

En el momento que el alcalde de Talca, Juan Carlos Díaz, se dedicaba a iniciar el discurso de la Cuenta Pública en el escenario del Teatro Regional, comenzaron a registrarse incidentes entre guardias y familiares del funcionario municipal fallecido Blas Becerra, quienes llegaron con lienzos para manifestarse.
Durante el altercado, la viuda de Becerra manifestó su disgusto con toda la entidad municipal, acusándolos de ladrones y de enriquecerse a costa de corrupción. En base a esto, argumentó que su marido era honesto y estaba asqueado de todas las irregularidades y robos que ocurrían dentro del trabajo municipal.
Los participantes de la manifestación fueron reprimidos por los guardias, mas el edil no se refirió al tema.





