Una operación liderado por PDI permitió desmantelar una red con 102 personas involucradas en la posesión, difusión y comercialización de material de abuso infantil.
La acción, llamada Operación Orión 3, se consolidó como el mayor procedimiento de su tipo en el país.
Como indicó el medio Página 7, la investigación, en conjunto con el Ministerio Público, se extendió por varias regiones. Incluyó análisis de plataformas digitales y seguimiento en redes de mensajería antiguas donde los imputados creaban grupos cerrados para compartir imágenes y videos de abuso sexual infantil.
Asimismo, el trabajo coordinado con agencias internacionales fue fundamental para identificar a víctimas en otras partes del mundo, informó PDI.
Según detalló la institución, algunos de los involucrados en la red incluso ofrecían este material a cambio de dinero, ocultando las transacciones bajo la apariencia de ventas de “ilustraciones”. En uno de los casos, detectado en la isla Robinson Crusoe, los pagos se realizaban mediante enlaces digitales con mensajes como “$1 igual a un video exquisito”.

El jefe nacional del Cibercrimen, prefecto inspector Maximiliano Macnamara, señaló la crudeza de los archivos incautados. Según informó, muchas de las víctimas registradas en los videos no superaban los cinco años de edad. En total, se decomisaron más de 30.000 videos y 11.000 fotografías, mientras que cinco menores fueron identificados como víctimas directas dentro del país.
Desde la Fiscalía de Alta Complejidad de O’Higgins, el fiscal Nicolás Núñez advirtió sobre la rapidez con que este tipo de contenido se disemina en el entorno digital:
“Una fotografía de un niño, niña o adolescente, puede terminar en dos segundos en 100 dispositivos en cualquier parte del mundo”, declaró.