Paula Barrios Goio. Propulsora del empoderamiento femenino, Metropolitan Chair Financial Empowerment G100. Socia de empresa de asesoría e intermediación financiera Bcorp Spa. Speaker de talleres de educación financiera para emprendedores y Fundadora del Podcast Liderarte, el arte de elegir tu vida. Co Founder de la Corporación Impulsa Vichuquén, Mentora en ChileConverge.
Voy a partir con una pregunta para ustedes, ¿Vendes tus productos fuera de tu comuna? Por ejemplo en Valparaíso, Santiago o incluso fuera de Chile?
Eso es lo que hoy permite la digitalización: acortar distancias, derribar muros geográficos y nuevas oportunidades, especialmente para quienes viven y trabajamos para regiones como el Maule.
Los emprendedores habitualmente piensan que comenzar un negocio desde una zona rural o una ciudad pequeña es una desventaja. Pero eso ha ido cambiando. Gracias a internet, redes sociales y herramientas digitales accesibles, hoy podemos mostrar lo que hacemos al mundo, aprender cosas nuevas desde la casa y, lo más importante, generar ingresos sin movernos del lugar donde nos gusta vivir o dejar de lado nuestra familia.
Les quiero contar la historia de un apicultor de Linares que durante años vendió su miel solo en ferias locales. Su producto era excelente, 100% natural, pero sus ventas eran limitadas. Hace un tiempo, uno de sus hijos le enseñó a usar Facebook Marketplace. Con algo de miedo y harto ensayo y error, empezó a subir fotos de sus frascos, a responder mensajes y a coordinar entregas. En aproximadamente un año, duplicó sus ventas. Ahora vende en otras comunas, tiene clientes en Santiago y hacia el norte. ¿Y cuál es la diferencia? ¡¡¡Solo se atrevió a dar el salto al mundo digital!!!
Como él, muchos emprendedores no solo del Maule, sino de todo Chile, tienen productos o servicios valiosos, pero no aprovechan las herramientas que podrían ayudarlos a crecer. Ojo que no necesitas ser un genio en tecnología. Se trata de perderle el miedo, de aprender lo básico y de ver la digitalización como un socio aliado a tu negocio.
Lo digital también permite mostrar como elaboramos nuestro producto. Por ejemplo, una persona que crea jabones artesanales con hierbas puede dar a conocer su proceso, historias de las plantas que usa y el cuidado de la piel con ese producto. Gracias a esa gestión, se puede acceder a aumentar el número de seguidores y llevar la venta de jabones hasta el lugar que se requiera. Lo interesante es que no es necesario estudiar un diplomado en marketing, ni de diseño, ni informática. Puedes aprender con videos de YouTube, talleres gratuitos y muuucha curiosidad.
Pienso que digitalizarse no significa dejar de hacer las cosas como antes. Significa sumar una herramienta más para nuestros negocios. Significa poder mostrar lo que haces, contar tu historia, cobrar con transferencia, recibir pedidos por WhatsApp o hacer una videollamada con un proveedor sin tener que dejar tu comuna para poder hacerlo..
Claro, no todo es perfecto. Convengamos que muchas comunas del Maule aún tienen problemas de conexión o falta de acceso a equipos. Y eso es una brecha que debemos trabajar, desde el Estado, desde las municipalidades y desde las organizaciones sociales. Pero también es cierto que cada vez hay más programas, talleres y fondos que apoyan la alfabetización digital. El desafío ahora es que más emprendedores se sumen, pregunten, aprendan y se atrevan.
La digitalización también es una herramienta de inclusión. En mis talleres. muchas emprendedoras que tienen a su cargo sus hijos o adultos mayores, me cuentan que gracias a esto, pueden trabajar desde la casa usando redes sociales o una tienda online y les ha permitido tener ingresos sin salir. Para adultos mayores, puede ser una forma de mantenerse activos y generar sentido de propósito. Para jóvenes, una puerta para emprender con ideas frescas y conectadas con el mundo.
Desde mi experiencia acompañando emprendedores en el Maule, sé que el potencial está. Hay talento, esfuerzo y muchas ganas. Lo que a veces falta es información, confianza y una red de apoyo para dar el primer paso.
Si estás leyendo esta columna y eres emprendedor o emprendedora, te invito a pensar: ¿Cómo podría ayudarte lo digital? ¿Qué podrías aprender esta semana que te acerque a más clientes o que te permita organizar mejor tu negocio?
Y si ya estás digitalizado, comparte tu experiencia. Enseña a otros, colabora, forma comunidad. Porque cuando uno avanza, todos avanzamos.
El Maule no necesita parecerse a Santiago. El Maule puede mostrar su propia fuerza, su identidad y su valor… al mundo. Y la digitalización puede ser el puente que nos conecte, sin perder nuestras raíces.
