El gobierno presentó la primera Política Nacional de Juventudes Rurales, que busca enfrentar el abandono juvenil del campo chileno.
Con el objetivo de frenar la migración juvenil desde zonas rurales hacia las ciudades y promover la equidad territorial, el Presidente Gabriel Boric presentó este lunes en La Moneda la Primera Política Nacional de Juventudes Rurales. La iniciativa fue elaborada por los ministerios de Agricultura y Desarrollo Social y Familia, a través de INDAP, ODEPA e INJUV. Fue anunciada en el marco del Día de las Campesinas y Campesinos.
El documento establece que, de ahora en adelante, toda política pública deberá considerar a las juventudes rurales como grupo prioritario. Según cifras oficiales, más de 1,5 millones de jóvenes viven en sectores rurales, pero enfrentan profundas brechas sociales, económicas y territoriales.
Entre los datos más preocupantes, se destaca que el 43% de las viviendas rurales no cuenta con agua potable. Solo un 10% tiene acceso a internet fija, y existe un déficit habitacional cercano a las 36 mil viviendas. Además, las mujeres rurales ganan un 21% menos que los hombres. La pobreza multidimensional en estos sectores alcanza un 28%, casi el doble que en zonas urbanas.
“Desde este año, INDAP pondrá a disposición subsidios no reembolsables para el pie de terrenos productivos. Además, BancoEstado entregará créditos con tasas preferenciales, todo con el fin de que nuestros jóvenes se queden en el agro”, indicó el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela.
La ministra de Desarrollo Social y Familia, Javiera Toro, enfatizó que “el mundo rural es una piedra angular para el desarrollo del país”. Esta política busca que quienes nacen y crecen en el campo puedan permanecer y proyectarse en él”.
La construcción del documento se realizó con un enfoque participativo e interministerial. En este, cerca de 3.000 jóvenes rurales expresaron sus ideas y preocupaciones. El director nacional de INDAP, Santiago Rojas, señaló que esta política responde a una solicitud directa del Presidente Boric. Busca asegurar un futuro más justo, resiliente y sostenible para el campo chileno.
Por su parte, Andrea García, directora de ODEPA, declaró: “Apoyar a las nuevas generaciones rurales es una inversión en soberanía alimentaria, desarrollo sostenible y cultura local”.
Además, Juan Pablo Duhalde, director nacional de INJUV, agregó: “La participación activa de jóvenes rurales permitió incluir temáticas como salud mental y participación social. Esto fortalece nuestro rol como actores clave en políticas públicas juveniles”.

Medidas concretas ya en marcha
Entre las iniciativas destacadas por el Gobierno, se encuentra Tierra Joven, que permitirá la compra de terrenos productivos. También incluirá el arriendo de tierras fiscales a precio justo y acceso a créditos especiales en alianza con el Ministerio de Bienes Nacionales y BancoEstado.
También se implementará el programa Mi Primer Negocio Rural, que ofrece hasta $3,5 millones por emprendimiento juvenil. Habrá acompañamiento técnico por tres años. Este programa beneficiará a 600 jóvenes en 14 regiones durante 2025, con una inversión superior a los $3.235 millones.
Entre 2022 y 2024, INDAP destinó más de $112 mil millones en inversión, asesorías técnicas y créditos orientados a juventudes rurales. Estos esfuerzos consolidan un nuevo enfoque de desarrollo con equidad y futuro para el mundo rural chileno.