Jueves, Septiembre 11, 2025
Jueves, Septiembre 11, 2025
Publicidad desktop
ad_nota_inead_nota_ine

Cuando el debate presidencial desnuda a los cantamañanas

Señor director

Cantamañanas y debate presidencial
En la primera acepción de la RAE se lee: Cantamañanas m. y f. coloq. Persona informal, fantasiosa, irresponsable, que no merece crédito.
En España y otros países latinoamericanos se usa esta expresión respecto de alguien cuando presume de aquello de lo que carece, o se compromete a algo que no tiene intención de hacer. Es una expresión coloquial empleada para hacer referencia a una persona que es considerada despreocupada o poco seria en sus acciones o comportamiento. También suele utilizarse para describir a alguien que no se toma en serio lo que habla o que presenta información de manera falaz o poco fundamentada. En definitiva, alguien que es irresponsable, poco serio y menos confiable.
En el ámbito político, la expresión se utiliza para referirse a aquellos “políticos” que no tienen experiencia o que carecen de habilidades y conocimientos necesarios para desempeñar su cargo. Se les considera personas poco preparadas o derechamente incompetentes.
Como sea, es una expresión que se suele utilizar para criticar a “políticos” que para desgracia de la ciudadanía se destacan por su falta de seriedad, por realizar promesas vacías o por tomar (o adelantar) decisiones sin fundamentos sólidos ni informados. Podría decirse que se emplea para calificar a aquellos políticos que no se consideran aptos para ejercer el cargo que ocupan o aspiran ocupar.
Entre nosotros se opta por las expresiones charlatán o exagerado, que tienen en común el objetivo de alardear constantemente de logros o habilidades que en realidad no poseen ni poseerán, exagerando o inventando situaciones con el utilitario fin de llamar la atención o impresionar a los electores.
El debate presidencial de este miércoles (y un sinfín de intervenciones que le han precedido) obliga a revisar el estándar de candidatos que tenemos, que optan nada más y nada menos que dirigir los destinos de un país que, este mes, como cada año, vive una fiesta nacional, que a ratos nos hace olvidar que lo realmente importante va más allá de una celebración “patriótica” compartiendo un asado o unas copas, escuchando cuecas o la música que se prefiera, celebración que parece apagar los cerebros o pausarlos.

Diego Palomo
U. de Talca

ad_avisos_legalesad_avisos_legales
ad_whatsapp_canalad_whatsapp_canal
Sigue informándote