Nuevos antecedentes sobre préstamos en dólares que la concejala María Ignacia González habría realizado a funcionarios municipales amplían las hipótesis en la investigación, mientras crece la tensión entre su familia y el administrador municipal.
La investigación por la desaparición de la concejala de Villa Alegre, María Ignacia González, incorporó una nueva línea de indagación relacionada con los préstamos en dólares que la autoridad realizaba a funcionarios del municipio. Estos antecedentes reactivaron el debate sobre posibles motivaciones vinculadas al caso.
Las hijas de la concejala señalaron al administrador municipal, Rodrigo Cancino, como un testimonio relevante. Ellas aseguraron que su madre le entregó dinero en dólares y que la deuda no estaba completamente saldada al momento de su desaparición. Según la familia, el monto adeudado podría bordear los 1.000 dólares.
Cancino respondió públicamente a estas afirmaciones y reconoció la existencia del préstamo, aunque lo calificó como un monto menor. “Les quedé debiendo 100 dólares, porque los cambié a euros y tengo que cambiarlos de vuelta”, señaló en el matinal Mucho Gusto. En esa instancia, también afirmó que la concejala solía facilitar dinero a varios funcionarios del municipio.
El administrador rechazó cualquier vínculo con la desaparición y cuestionó las acusaciones de la familia. “Es complejo que digan que yo la asesiné o pidan que me desvinculen”, expresó. Además, afirmó que las hijas de María Ignacia “están mintiendo” y las instó a solicitar un reforzamiento de los recursos investigativos.
Durante su relato, Cancino aseguró que la propia familia habría mencionado inicialmente la posibilidad de un suicidio. “Javiera me dice: ‘¿Y si ella atentó contra su vida?’”, comentó, recordando una de sus primeras conversaciones con la hija de la concejala.
La familia de González respondió que el testimonio del administrador presenta contradicciones y que les resulta “extraño que alguien que viaja a Europa no tenga dólares”. También cuestionaron por qué habría solicitado dinero en esa moneda si su destino utilizaba euros.
Los nuevos antecedentes aparecen a pocos días de cumplirse cinco meses desde la desaparición de María Ignacia González, vista por última vez durante la madrugada del 15 de junio. La investigación continúa abierta y con múltiples hipótesis aún en revisión.





