Artículo de opinión por Jorge Navarrete Bustamante, Director del Magister en Gestión y Políticas Públicas, Universidad de Talca.
El 17 de diciembre se realiza el Plebiscito de salida que definirá si Chile tendrá una nueva Constitución, o si continuará rigiendo la de 1980.
La Kastitución no considera un nuevo proceso constituyente.
El voto contendrá la pregunta: “Está usted a favor o en contra del texto de Nueva Constitución”; y los votantes deberán marcar una opción entre estas dos: “A favor” y “En contra”.
Evidentemente, la Kastitución, fracasó en lo esencial que debe tener toda “Carta Fundamental”: NO UNE A LOS CHILENOS NI A LAS CHILENAS EN UNA VISISÓN COMPARTIDA DE PAÍS.
Por ello, más vale “diablo conocido que por…” razón suficiente, y pleno de sentido común por la que cotaré: EN CONTRA DE LA KASTITUCIÓN.
En tal escenario corresponde entonces, reconocer que la actual constitución, reformada en más de un 80% en democracia, se ha ganado su espacio en nuestra convivencia ciudadana, a diferencia de la Kastitución, pues: CONSTITUCIÓN QUE HOY NOS RIGE ESTABLECE CERTEZAS.
Y es así porque nadie con meridiana objetividad puede desconocer que la Kastitución es un grave retroceso en los avances civilizatorios logrados por las mujeres, jóvenes, minorías sexuales, trabajadores y adultos mayores de Chile.
El integrismo de ésta Kastitución llega al punto de vulnerar derechos fundamentales al constitucionalizar la objeción de conciencia de instituciones; “rareza” jurídica que no existe en ninguna país democrático de la tierra, pues acá se propone que cualquier centro de salud o educativo puede rechazar a una personas por su religión o convicción, aunque peligre su vida; o expulsar a quién precise de educación sea por embarazo adolescente, homosexualidad u otra consideración similar (ver art. 16. Num 13, letra a)
La kastitución establece la privatización expedita de bienes públicos como riberas de ríos, de lagos; plazas, parque y similares (Art. 18 num. 34) fulminando el “Espacio Público” derecho adquirido y respetado por las naciones más integradoras de la tierra.
La Kastitución no sólo mantiene sino que fortalece las AFP; y no establece ni una sola norma que permita mejorar las jubilaciones (Art 16, num 28, letra b)
La Kastitución, además es rechazada, por los profesores de derecho de la Universidad Adolfo Ibáñez Antonio Bascuñán, Rodrigo Correa, Samuel Tschorne y Javier Wilenmann, ya que dificulta la penalización del narcotráfico. En estricto rigor señalan que tal propuesta: “hace inconstitucional la penalización del narcotráfico” (…) Así de desconcertante es la falta de cordura de sus redactores”.
Y esa es entonces, la kastitución de la “libertad y de la seguridad”… la misma que dice “jódete” en lugar de decir a todas las chilenas y chilenos: te acompaño, te ayudo, te escucho, te apoyo”.
En suma, si la Kastitución la rechazan hasta los propios republicanos (parlamentarios y militantes) que dejaron a Kast, a su partido, y seguidores UDIs, RN, y de EVOPOLIS que deberán dar cuenta a las chilenas y chilenos ante la historia.
Por ello, y más: VOTARÉ EN CONTRA.