Con una procesión por el centro de Talca y una Eucaristía masiva, la Familia Salesiana celebrará la solemnidad de María Auxiliadora este 24 de mayo.
La Familia Salesiana de Talca conmemorará la solemnidad de María Auxiliadora este viernes 24 de mayo, bajo el lema “María guía nuestra esperanza”, con una jornada de fe y comunidad que incluirá una procesión por el centro de la ciudad y una celebración eucarística.
La jornada comenzará a las 15:00 horas desde la Estación de Ferrocarriles (2 Sur con 11 Oriente), desde donde partirá la procesión. El recorrido continuará por las calles céntricas de Talca y culminará en el Colegio Salesianos Talca, ingresando por 4 Oriente con 2 Sur. A las 17:00 horas, en el gimnasio del colegio, se celebrará la Eucaristía final.
El evento reunirá a todos los grupos que conforman la Familia Salesiana, entre ellos los Salesianos de Don Bosco, Hijas de María Auxiliadora, ADMA, Salesianos Cooperadores, EPE, EME, VDB, exalumnos y diversos colegios salesianos, además de centenares de devotos que veneran a María bajo la advocación de Auxiliadora de los cristianos.
El padre David Albornoz, director de la Presencia Salesiana en Talca, señaló que esta fecha tiene una relevancia especial:
“María Auxiliadora guía el caminar de los cristianos en todo momento. En este año jubilar, le pedimos que nos conduzca hacia la Esperanza que es Cristo”.
La fiesta no solo es una tradición local, sino también una expresión de un legado que se remonta a 1814, cuando el Papa Pío VII atribuyó su liberación a la intercesión de María Auxiliadora, instaurando así su festividad el 24 de mayo. Años más tarde, San Juan Bosco impulsó esta advocación como una guía en tiempos difíciles.
“La Virgen quiere que la honremos con el título de Auxiliadora”, dijo Don Bosco.
“Los tiempos que corren son tan aciagos que tenemos necesidad de que la Virgen nos ayude a conservar y defender la fe cristiana”.
La celebración del 24 de mayo busca renovar el testimonio de fe, manifestando que María sigue caminando junto a los jóvenes y a todo el pueblo creyente, animándolos a confiar en la esperanza que representa Cristo.
