Por segunda jornada consecutiva, decenas de camiones con ayuda humanitaria fueron saqueados en el sur de la Franja de Gaza.
Como indicó el medio Cooperativa, los hechos ocurrieron en la madrugada del domingo cerca de Jan Yunis, cuando los camiones se dirigían al norte, una de las zonas más afectadas por la escasez de alimentos. Miles de personas interceptaron la caravana para tomar harina, azúcar, legumbres y otros productos esenciales.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) confirmó que fueron los propios habitantes quienes se apoderaron de la carga. Solo el sábado ya se había reportado el saqueo de otros 77 camiones. “La población está desesperada y no puede soportar ver pasar la comida sin recibir nada”, expresó el organismo.
Desde el fin del bloqueo total impuesto por Israel el 2 de marzo, los camiones con alimentos han ingresado de forma esporádica, enfrentando demoras por inspecciones y exigencias logísticas. Según la UNRWA, apenas 200 camiones han logrado distribuir ayuda desde entonces, muy por debajo de los 500 que entraban a diario antes del conflicto.
Negociaciones
En medio de la crisis, Hamás reiteró que sus demandas en las negociaciones para un alto el fuego no buscan ventajas políticas, sino condiciones básicas. “Exigimos enmiendas a los párrafos que no garantizan el cese de las matanzas”, señaló Mahmud Mardawi, dirigente del grupo, al rechazar el actual borrador estadounidense. También insistió en que los cambios propuestos son “idénticos a lo acordado” con el enviado especial de EE. UU., Steve Witkoff.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, calificó la respuesta de Hamás como “inaceptable”. El último documento de negociación contempla una tregua de 60 días y la liberación de rehenes, pero no exige explícitamente el retiro de las tropas israelíes ni un cese definitivo de la ofensiva militar. Mientras tanto, los bombardeos continúan y la situación humanitaria en Gaza se vuelve cada vez más crítica.
