La muerte de un menor en el hospital Bautista Al Ahli eleva a 114 las víctimas por desnutrición en Gaza. Autoridades alertan de 70.000 niños afectados.
La emergencia humanitaria en Gaza continúa agravándose. Este viernes, el hospital Bautista Al Ahli informó la muerte de Abdel Qader Al Fayyumi, un niño que sufría desnutrición severa producto de la falta de alimentos y productos básicos en el asediado enclave palestino.
Con este caso, la cifra de fallecidos por malnutrición asciende a 114 personas, de las cuales 82 son menores de edad y 32 adultos, según datos difundidos por las autoridades locales.
En las últimas semanas, los pocos hospitales que continúan operativos han advertido un preocupante aumento de niños con cuadros clínicos de desnutrición. De acuerdo con cifras de las autoridades palestinas, al menos 70.000 menores en Gaza ya se encuentran en una fase crítica de desnutrición clínica.

Pese a que a finales de mayo Israel permitió la entrada limitada de ayuda humanitaria, la distribución ha sido insuficiente. La Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), organización estadounidense a cargo de parte del reparto, solo ha logrado operar 4 centros de distribución. Esto está muy lejos de los 400 que mantenía la ONU antes del bloqueo. Además, las rutas de acceso se han convertido en zonas de riesgo. Más de 1.000 personas han muerto por disparos del Ejército israelí cerca de los puntos de entrega o en trayectos hacia ellos, según el Ministerio de Sanidad de Gaza.
A esta grave situación se suma el alza desproporcionada de precios en los pocos mercados que reciben ayuda. Esto vuelve inalcanzables los productos para la mayoría de la población.
El Ejército israelí responsabiliza a las agencias de la ONU por no retirar ni distribuir cerca de 950 camiones con ayuda humanitaria que permanecen retenidos en la frontera. Las Naciones Unidas, sin embargo, denuncian que las restricciones impuestas por Israel dificultan la recolección y reparto de los suministros.
