Tras una seguidilla de graves accidentes, la senadora Paulina Vodanovic solicitó al MOP una campaña vial preventiva. También pidió el nombramiento urgente de un nuevo director de Vialidad para el Maule.
Una serie de accidentes graves en la Ruta L-30-M, conocida como la “Ruta de la Muerte”, ha vuelto a encender las alarmas en la Región del Maule. En solo una semana, se registró el fallecimiento de un motorista. También ocurrió el volcamiento de un bus con 11 heridos y un choque entre un camión y un vehículo menor, hechos que motivaron una enérgica solicitud de la senadora Paulina Vodanovic al Ministerio de Obras Públicas (MOP).
La parlamentaria exigió una campaña de concientización vial preventiva. Esta debe reforzar el cuidado de los conductores que transitan diariamente por esta transitada ruta, que conecta San Javier con Constitución.
“Es lamentable lo que ocurre constantemente en la Ruta L-30-M. Si bien se logró la licitación para la doble vía que anunciamos en junio con la Dirección de Concesiones, seguimos con accidentes fatales. Esto nos obliga como autoridad a tomar medidas preventivas en torno a la concientización vial”, señaló la senadora del Maule.
En ese sentido, Vodanovic propuso al MOP implementar una campaña visible. Esta campaña debería incluir letreros y señaléticas que adviertan del peligro constante de esta carretera, mientras se avanza en el proyecto de doble vía.
Además, llamó al MOP a designar con urgencia a un nuevo director regional de Vialidad, puesto que actualmente está vacante. Según la senadora, esta autoridad es clave para liderar acciones preventivas concretas. También para coordinar con los distintos actores involucrados en la seguridad vial de la zona.
“He propuesto al MOP que se realice una campaña con letreros y señaléticas que recuerden el peligro de la ruta, y que se nombre pronto a un director regional de Vialidad. Este nuevo director debería liderar medidas inmediatas en la L-30-M”, enfatizó.
La ruta L-30-M sigue acumulando tragedias y demandas ciudadanas. La comunidad espera que estas advertencias se traduzcan en acciones concretas y no en promesas post-accidente.


