Chile rinde homenaje al Barros Luco cada 9 de junio, un sándwich icónico con historia presidencial. Descubre su origen y cómo prepararlo en casa.
Cada 9 de junio, el paladar chileno celebra uno de sus íconos gastronómicos más queridos: el Barros Luco, un sándwich que combina carne y queso fundido en pan crujiente y cuya historia se remonta a los tiempos de un expresidente.
El origen de esta preparación se atribuye al presidente Ramón Barros Luco, quien entre 1910 y 1915 solía almorzar este sándwich en la tradicional Confitería Torres, en el centro de Santiago. La combinación de carne a la plancha y queso derretido se convirtió en su elección habitual, al punto que terminó llevando su nombre.
“El Barros Luco guarda la esencia de nuestra cultura, es simple pero con identidad”, comenta Catherine Escobar, gerente comercial de la cadena El Carnicero, que conmemora la fecha destacando su preparación en sus sucursales.
Actualmente, esta receta sigue vigente en muchas cocinas y locales del país. En el reconocido local talquino “La Cafetería“, por ejemplo, se ofrece con un valor de $11.900. Su vigencia demuestra cómo la gastronomía chilena honra sus tradiciones con orgullo.
Para quienes quieran disfrutarlo en casa, la receta es sencilla:
Ingredientes:
- 300 gramos de carne de churrasco o filete
- 4 rebanadas de pan tipo frica o marraqueta
- 4 láminas de queso fundido
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite o mantequilla
Preparación:
- Sazonar la carne y cocinarla en sartén caliente con aceite o mantequilla.
- Tostar ligeramente el pan.
- Armar el sándwich con la carne y el queso fundido.
- Volver a calentar en la sartén para que el queso se derrita y el pan quede crocante.
La celebración del Día del Barros Luco es parte de una serie de fechas que homenajean la cocina popular, como el Día del Completo o el Día de la Hamburguesa, reforzando el vínculo emocional y cultural que los chilenos tienen con sus sabores más tradicionales.
