En la zona rural de San Rafael, la inquietud de un estudiante se convirtió en un proyecto científico con proyección internacional.
Máximo Silva Abaca, de 12 años y alumno del Colegio Santa Madre de Dios, lidera la iniciativa titulada “Por qué los insectos, bichos y aves se están decolorando”. Este estudio que busca entender cómo el cambio climático está alterando la apariencia de la fauna local.
El trabajo nació de una observación cotidiana. Cuando tenía apenas siete años, él notó que los “bichos” del patio de su casa habían perdido los tonos intensos que recordaba. Con respaldo del Club Ciencias Chile, su directora Pamela González y la Dra. María Angélica Riquelme, transformó esa curiosidad infantil en una investigación sistemática que demuestra cómo las variaciones de temperatura, la humedad y la acción humana están “apagando” el color de diversas especies.
El joven investigador realizó un análisis comparativo entre zonas rurales y urbanas, centrado en mariposas representativas del país —la Mariposa Blanca (Mathania leucothea) y la Mariposa Vanessa (Vanessa carye)—, además de la Chinita Arlequín y aves de corral. Sus observaciones revelan que la pigmentación funciona como un termómetro biológico del entorno. En el caso de la Vanessa carye, determinó que pierde viveza cromática en periodos de sequía y necesita vegetación abundante para superar el otoño y la primavera. La Mathania leucothea, en cambio, mostró mayor tolerancia a ambientes secos y a las altas temperaturas del verano.
Repercusión internacional
Las aves también reflejaron estos cambios. Al estudiar un pollo Rhode Island Roja, Máximo registró que en febrero —cuando el calor en el Maule bordeó los 38°C— el ejemplar presentó patas más pálidas y pérdida de color. Este efecto se revertía durante el invierno. Su conclusión fue clara: “descubrí una pista importante: los insectos dependen de su ambiente”, explicó. Señaló que “en lugares húmedos mantenían sus colores, pero en lugares secos, los perdían”.
El estudio no se detuvo en la dimensión biológica. El menor relacionó estas variaciones con la transformación del paisaje en San Rafael: la tala de especies nativas, la expansión de parcelas de agrado y el agotamiento de las norias. Tales fenómenos que han reducido la humedad del suelo y alterado los ecosistemas locales.
La relevancia de su trabajo lo llevó a obtener el primer lugar en la Feria Nacional del Club de Ciencias Chile en 2023. Posteriormente, presentó su investigación en la Feria Latinoamericana de Ciencias en Lima 2024. Allí incluso conversó con expertos de la NASA. En 2025 fue invitado a exponer en la ExpoCiencias de Fortaleza, Brasil.
