Las autoridades justifican la medida indicando que los caballos propagan semillas invasoras, pueden alterar la cubierta vegetal y causar erosión de los suelos.
Las autoridades australianas comenzaron este jueves un programa para sacrificar a miles de caballos salvajes en el parque nacional Kosciuszko. Las especies serán atacadas por francotiradores montados en helicópteros. El objetivo es proteger el frágil ecosistema de la zona, ubicada a unos 350 kilómetros al suroeste de Sídney.
En tal contexto, el Servicio Nacional de Parques y Vida Salvaje de Nueva Gales del Sur anunció en su portal de Internet el cierre parcial de Kosciuszko, que abarca unos 6 mil 900 kilómetros cuadrados. De este modo, llevarán a cabo “operaciones de disparos aéreos” hasta el 4 de octubre, durante el otoño y el invierno austral.
Este programa, que estuvo congelado durante unos veinte años, tiene como objetivo reducir la población de caballos salvajes o “brumbies” en Kosciuszko a 3 mil para el año 2027. Se estima que actualmente hay entre 12 mil 797 y 21 mil 760 equinos que deambulan sin control por la zona.
Los francotiradores contratados por las autoridades también dispararán contra venados, cerdos y otros animales salvajes. Acción que es parte de un plan polémico anunciado en octubre del año pasado, enfrentado protestas de grupos defensores de los animales, quienes argumentan que el método es cruel.
El sacrificio masivo de animales desde el aire, considerado por sus defensores como un método que causa menos dolor y es eficiente y económico, busca mitigar el daño que los caballos salvajes causan en los hábitats de la fauna nativa.
Según las autoridades, estos animales compiten por alimentos, propagan semillas invasoras, pueden reducir o alterar la cubierta vegetal, causar erosión de los suelos y las riberas de los ríos, lo que afecta a la calidad del agua e impacta en la actividad agrícola.
La última vez que el gobierno de Nueva Gales del Sur utilizó francotiradores para sacrificar caballos salvajes fue en octubre de 2.000, cuando se eliminaron 606 caballos. Cabe mencionar que, otras jurisdicciones también utilizan este método, con diferentes frecuencias, para controlar poblaciones de caballos salvajes, camellos, búfalos y burros, entre otros.
