El texto, que debe pasar por el tercer trámite legislativo en el Senado, tiene como principal sustento que estos artefactos electrónicos también tienen sustancias altamente dañinas para el organismo.
Con 134 votos a favor y uno en contra, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto que busca regular la venta y consumo de los cigarrillos electrónicos, conocidos popularmente como vaporizadores, los cuales han gozado de buena popularidad durante los últimos años.
Los argumentos para su restricción se basan en que estos aparatos emiten sustancias muy dañinas para el cuerpo humano, muy contrario a ciertas creencias populares sobre el “reemplazo sano” del tabaco convencional.
El proyecto de ley consideró que la Organización Mundial de la Salud define los vaporizadores como “tabaco recalentado”. Si bien, el líquido de estos productos no tiene tabaco, algunos sí tienen nicotina, la misma sustancia que se extrae de sus hojas.
En cuanto a las restricciones, la iniciativa busca prohibir la instalación de máquinas expendedoras y la comercialización, ofrecimiento o distribución a menores de 18 años. Además, se busca que sus envases tengan advertencias, tal cual como las cajetillas de cigarrillos.
